El Gobierno Nacional dispone un plan integral en la subregión, para fomentar el sector turístico.
La Paya de Belén es uno de los destinos turísticos favoritos del Catatumbo, declarada Patrimonio Nacional en 2005.
En el segundo semestre de 2023, el Gobierno Nacional planea abordar 36 destinos fundamentales para el turismo y entre ellos está el Catatumbo, Norte de Santander.
De acuerdo con el ministro de Comercio, Industria y Turismo, Germán Umaña, en entrevista con La Opinión, estarán llegando a la zona con una oferta del Estado, la cual se integra a innpulsa y sus Centros de Reindustrialización Zasca, porque identificaron algunos que deben implementar.
Umaña precisó que el Fondo de Turismo (Fontur) también hace parte de esa apuesta, porque identificaron “unos temas importantes en materia de turismo”, aunque “con dificultades por la violencia y la seguridad”.
Explicó que también se sumarán Artesanías de Colombia, porque se pueden integrar a los circuitos nacionales e internacionales; y acciones de los ministerios de Agricultura y de Transporte.
“Usted sabe que por el Catatumbo solucionamos la cosa de dos maneras: o nos permiten el paso por Venezuela o hacemos una carretera, que nos faltan 100 kilómetros para integrar el potencial turístico y agrícola de ese departamento a la nación. Por ahora no tenemos -dinero- para la carretera, pero sí estamos hablando con Venezuela y, más o menos en 15 días, vamos a tener el tránsito por esa carretera tan importante que ustedes conocen”, afirmó el ministro.
Germán Umaña informó que esa vía que conectará el Catatumbo con Venezuela será la de Tibú, municipio que limita con el vecino país al norte y al oriente.
Falta conectividad
El presidente ejecutivo nacional de la Asociación Hotelera y Turística de Colombia (Cotelco), José Andrés Duarte, señaló que, con el capítulo del gremio en Norte de Santander, están propiciando para las próximas semanas el desarrollo de un proyecto que va a permitir encontrar al sector de alojamiento y hospedaje y al turismo en general del oriente colombiano, con una mirada hacia la frontera.
“En ese espacio se busca abrir reflexiones sobre cómo vamos a estimular el consumo turístico de los venezolanos, que tienen capacidad de consumo y pueden llegar a través de nuestros puntos fronterizos. Ahí tenemos que facilitar, primero, las condiciones de acceso, por ejemplo, el SOAT (Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito). Si nosotros no superamos ese reto, vamos a perder la posibilidad de una conexión positiva y que genere valor en el territorio”, expresó.
Duarte destacó que otro punto es que el transporte público especial y turístico pueda ser transfronterizo, para lograr que una persona que venga de Venezuela no tenga que transbordar en la frontera, para embarcarse en otro bus y continúe el trayecto.
“La región puede gozar de un desarrollo turístico, siempre y cuando tenga conectividad. Hacia el Catatumbo hay muchas deficiencias en la conectividad terrestre. Se puede garantizar la llegada por el lado de San Alberto (Cesar) y meterse por Ocaña, por donde uno encuentra un aprovechamiento de historia y cultura a favor del turismo, conectado con La Playa de Belén, que está cercano al Catatumbo, para empezar a estimular el interés de acercarse a la región”, añadió el líder nacional Cotelco.
Sostuvo que es muy difícil plantearle al turista conocer el Catatumbo sin tener una estrategia, un producto y ofrecer las condiciones de seguridad. Primero se deben atender esos puntos, para luego hacerle la promoción adecuada. Aseguró que está convencido de que esa zona es la mejor apuesta de desarrollo para la región.
El potencial de la subregión
La subdirectora ejecutiva del Capítulo Oriente de la Asociación Colombiana de Agencias de Viajes y Turismo (Anato), Jimena Daw, resaltó que la importancia del Catatumbo para el turismo del país se debe a varios factores:
Biodiversidad: la región alberga una gran diversidad de flora y fauna, lo que la convierte en un lugar interesante para los amantes de la naturaleza y el ecoturismo. Los turistas pueden disfrutar de actividades como el avistamiento de aves, senderismo, entre otras actividades.
Cultura: además de su belleza natural, la región también tiene una rica herencia cultural, con comunidades indígenas y tradiciones locales que podrían ser de interés para los turistas interesados en la cultura y la historia. Por ejemplo, La Playa de Belén fue declarada Patrimonio Nacional por el Ministerio de Cultura en 2005.
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Potencial de desarrollo: el turismo en el Catatumbo tiene un gran potencial para generar empleo y desarrollo económico en una región que históricamente ha enfrentado desafíos socioeconómicos. El impulso al turismo puede contribuir a mejorar la calidad de vida de las comunidades locales.
A este anuncio de Mincomercio se suma la reactivación del aeropuerto Aguas Claras de Ocaña, con tres rutas operadas por Satena, que también ayudarán a dinamizar la economía de la subregión e impulsar el turismo.
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