Las autoridades y el Banco Agrario trabajan para determinar la magnitud de las pérdidas después de que las disidencias de las FARC saquearan la sucursal del banco en Jambaló, afectando a la comunidad y la entrega de subsidios.
Tras el ataque, continuará el despliegue de operaciones militares por parte de tropas del Ejército en la zona urbana y rural de Jambaló.
Los guerrilleros dejaron la sede de la entidad financiera del Estado totalmente destruida, además, se llevaron el cajero automático y todo el dinero alojado en el banco.
El presidente de la entidad, Hernando Chica Zuccardi, se pronunció al respecto a través de un comunicado y señaló que “aunque no tuvimos víctimas que lamentar en este punto, es un hecho que condenamos y reprochamos con toda contundencia, porque el Banco Agrario es un patrimonio de los colombianos y los más afectados son los ciudadanos de Jambaló y la región, ya que alterará la normal operación y entrega de recursos a los ciudadanos”.
Informaron que se están evaluando las pérdidas y la cuantía del robo, tanto en la oficina como en el cajero automático, precisando además que están trabajando por restablecer el servicio lo más pronto posible, para seguir atendiendo a todos los clientes y usuarios en el municipio.
El directivo envió también un mensaje de solidaridad a los funcionarios del Banco y a toda la comunidad caucana “por estos lamentables ataques delincuenciales, al tiempo que agradecemos a nuestra Policía y Ejército Nacional por su respaldo y apoyo, y también nos solidarizamos con ellos. Su trabajo es fundamental por la seguridad de todos los colombianos”.
¿Cómo empezó todo?
De acuerdo con la comunidad, el ataque comenzó alrededor de las 4:20 de la mañana del domingo, cuando más de cien integrantes de la Dagoberto Ramos ingresaron al casco urbano de este municipio.
Luego empezaron a hostigar a los uniformados que permanecen atrincherados en la estación de Policía. Esto, entonces, desencadenó en combates, los cuales trastocaron la tranquilidad de la población civil.
“Todo el mundo descansaba cuando empezó esa plomacera. Era en pleno pueblo, de ahí que la gente lo que hizo fue permanecer en sus casas, tirarse al piso hasta que ya con la llegada de la mañana empezar a salir a ver qué era lo que pasaba”, narró un habitante del municipio.
Luego empezaron las detonaciones. Una, dos, tres, lo que aumentó el terror de la gente, porque hace muchos años no enfrentan esta clase de situaciones y creían que la guerra era cosa del pasado.
“Ya la gente vio que la sede del Banco Agrario estaba en ruinas, las explosiones eran que los disidentes asaltaron la sede financiera, y a punta de bombazos, la acabaron para posiblemente llevarse el dinero, eso no está muy claro”, agregó otro habitante.
En este momento estamos evaluando con Banco Agrario una caja extendida, para dar solución lo más pronto”. Laura Sarabia, directora del Departamento de Prosperidad Social.
Autoridades se pronunciaron
El brigadier general Federico Mejía, comandante del Comando Específico del Cauca, sostuvo al diario El País de Cali que el ataque habría sido en respuesta a la retoma del Cañón del Micay por parte de las Fuerzas Militares, las cuales vienen realizando una ofensiva militar en el departamento.
Por su parte, la ministra de Agricultura y Desarrollo Rural, Jhenifer Mojica, rechazó el atentado y exigió “reforzar la seguridad para el banco y la comunidad”.
Entre tanto, la directora del Departamento de Prosperidad Social (DPS), Laura Sarabia, también rechazó el ataque y aseguró que los usuarios que reciben la Renta Ciudadana se verán afectados por el saqueo de la entidad que entrega dicho subsidio.
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