La respuesta rápida es sí, es legal, porque es constitucional.
Guillermo Lasso, el presidente de Ecuador, decretó la disolución del Congreso de su país aplicando la llamada 'muerte cruzada'. Con esta decisión, en el país vecino se tendrá que convocar a elecciones legislativas y presidenciales para completar el actual mandato de cuatro años.
Al gobierno de Lasso aún le quedan dos años, ya que tomó posesión el 24 de mayo de 2021.
Pero, ¿qué tan legal es la 'muerte cruzada'? La respuesta rápida es que lo es, pues está contemplada en al artículo 148 de la Constitución ecuatoriana. Y además del Legislativo, se disuelve también el Gobierno y su gabinete.
Y es la primera vez que un mandatario aplica la norma, que puede ser ejercida una sola vez durante los tres primeros años del mandato.
Cuándo se aplica la 'muerte cruzada'
La 'muerte cruzada' es posible aplicarla en dos escenarios sin necesidad del dictamen de la Corte Constitucional ecuatoriana:
- Por grave crisis política y conmoción interna.
- Si de forma reiterada se obstruye la ejecución del Plan Nacional de Desarrollo ecuatoriano.
¿Qué pasa una vez decretada?
El artículo 148 establece que en un plazo máximo de siete días, después de la publicación del decreto de disolución, el Consejo Nacional Electoral (CNE) ecuatoriano tendrá que convocar, para una misma fecha, a elecciones legislativas y presidenciales para completar el periodo de Gobierno actual. En este caso es de 2 años.
¿Quién gobierna mientras las elecciones?
El mandatario que decrete la 'muerte cruzada' podrá gobernar vía decreto, pero solo en materia económica y con la aprobación de la Corte Constitucional.
"Hasta la instalación de la Asamblea Nacional, la Presidenta o Presidente de la República podrá, previo dictamen favorable de la Corte Constitucional, expedir decretos-leyes de urgencia económica, que podrán ser aprobados o derogados por el órgano legislativo", se informó.
¿Lasso podrá presentarse a las elecciones?
Sí, puede presentarse a las elecciones. De resultar ganador, "dicha elección debe
entenderse como una ratificación por parte del pueblo de la gestión del Presidente para terminar el período para el que fue inicialmente electo".
Vale aclarar que si este escenario llega a ser real, una nueva elección de Lasso no será visto como un nuevo periodo, sino como la continuación del actual.
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