Los familiares de las víctimas denunciaron la indiferencia y el miedo que les generan los grupos irregulares que operan en la zona.
Organizaciones aseguran que del lado venezolano no investigan casos de desapariciones forzadas.
De lo que muy poco se habla en la frontera colombo-venezolana, es del sin número de personas desaparecidas en los pasos fronterizos, por ello, este aspecto está siendo examinado por diputados de la Comisión de Frontera y Comisión para el Diálogo, Paz y Reconciliación de la Asamblea Nacional de Venezuela que se acercaron hasta Cúcuta para conversar con los familiares de las víctimas.
Los parlamentarios trabajan en presionar al gobierno venezolano para que se establezca una alianza con Colombia, a fin de atender más de 220 casos de personas desaparecidas durante su tránsito por trochas. Y solicitarán una reunión con el Fiscal General de la República, Tareck William Saab, para presentarle un primer reporte de lo que observaron en la zona limítrofe.
Luis Eduardo Martínez, primer vicepresidente de la Comisión de Diálogo, Paz y Reconciliación del parlamento nacional, expuso que escucharon testimonios dolorosos de familiares de personas desaparecidas desde el 2010, y sus deudos todavía guardan la esperanza de que aparezcan.
“Solicitaremos que la Fiscalía venezolana se aboque con mayor prontitud a los casos que han sido denunciados”, dijo.
Apuntó que solicitarán un operativo con el Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (Saime) que permita la identificación con cotejo de huellas de los cuerpos que se encuentran en Norte de Santander, a fin de determinar si son o no algunos de los desaparecidos, “es imposible que cerremos los ojos ante esta situación”.
Indiferencia
El parlamentario Juan Carlos Palencia, miembro de la Comisión de Frontera, subrayó que no hay respuesta inmediata sobre la desaparición de estas 220 personas, ni del lado venezolano ni del colombiano, de allí que refirió que ahora que se restablecieron las relaciones diplomáticas y consulares entre ambos países, exista una coordinación entre las fiscalías, así como organismos de investigación criminal.
Expuso que las familias no saben a dónde acudir ante la desaparición de sus seres queridos, en vista de que, cuando acuden
ante un organismo venezolano, les dicen que se olviden de sus consanguíneos.
Detalló que en la morgue de Cúcuta hay 30 cadáveres que no han sido reconocidos aún, por tanto, llevarán ante la Asamblea Nacional un derecho de palabra sobre esta realidad. Así pues, se encuentran desarrollando una base de datos sólida sobre cada desaparecido.
También, planteó la necesidad de crear un espacio virtual en donde los familiares de personas desaparecidas puedan denunciar y sean investigados estos hechos en donde resultan ser víctimas, tanto colombianos como venezolanos.
Solicitó además a los familiares de personas desaparecidas a que denuncien estos hechos y los hagan llegar a la Comisión de Frontera, con el propósito de presionar y que se inicien procesos de averiguación.
“Las fiscalías venezolana y colombiana les tienen miedo a estos casos, les tienen miedo a hablar de desapariciones forzadas en la zona, quieren invisibilizar los casos. Cuando los familiares van a los diferentes cuerpos de seguridad, les dicen que no reúnen los requisitos ni califican para ser considerados casos de desaparición forzada de personas”, dijo
Juan Carlos Palencia.
Refirió que los habitantes ahora hacen un silencio cómplice cuando se desaparece un allegado, van ellos mismos a buscar información en las trochas y allí les dicen que mejor no sigan indagando.
“Se está convirtiendo en una práctica común”, manifestó el diputado Palencia,
quien además enfatizó que varios grupos irregulares, como la guerrilla colombiana, paramilitares y bandas criminales como el Tren de Aragua están dedicadas a la desaparición forzada en las trochas, por lo que expresó que ya no hay excusa para que se mantengan desguarnecidos los pasos informales.
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