Dos contratos que suman US$3.684 millones mantienen bajo tensión al Gobierno de Gustavo Petro y abren un debate sobre la conveniencia, transparencia y oportunidad fiscal de las inversiones militares ordenadas en el ocaso de su mandato. Las operaciones —una con la firma sueca Saab para la compra de aviones de combate Gripen y otra con la estadounidense Vertol Systems para reparar helicópteros Mi-17— hoy están en el centro de cuestionamientos por presuntos sobrecostos e incumplimientos.
El negocio Gripen: la compra más costosa de la historia militar reciente
El contrato más voluminoso es el firmado con Saab, por US$3.652 millones (alrededor de $16,5 billones), destinado a adquirir 17 aviones Gripen para reemplazar la envejecida flota de Kfir. Aunque la decisión se había presentado como una apuesta por la modernización aérea, el precio final encendió todas las alarmas: US$215 millones por unidad, frente a una oferta inicial de US$150 millones, según fuentes militares.
Lo que más inquieta es el contraste con otras transacciones internacionales. La senadora María Fernanda Cabal comparó en X la compra de Colombia (US$213 millones por avión) con la de Tailandia, que pagó US$137 millones, lo que implicaría un incremento del 55%. La congresista lanzó además señalamientos políticos que involucraron a la exesposa del presidente Petro, radicada en Suecia.
Saab había asegurado en 2021 que Colombia podía adquirir aeronaves de “alto rendimiento” por cerca de $10 billones, frente a la propuesta francesa de los Rafale, por unos $15 billones. Sin embargo, tres años después el negocio terminó costando $6,5 billones más de lo anunciado entonces por el propio CEO de la compañía, Micael Johansson.
¿Por qué aumentó el costo? Tres explicaciones clave
Fuentes militares consultadas señalan tres factores principales:
-
Infraestructura inexistente:A diferencia de Tailandia, Colombia no tenía simuladores, software ni equipos previos para operar los Gripen. Todo el andamiaje debe instalarse desde cero.
-
Financiación extendida hasta 2032:Petro pidió tres años de gracia y comprometió vigencias futuras, aumentando el costo total por variación del euro y proyecciones macroeconómicas.“Las anualidades no las pagará mi gobierno”, admitió el mandatario.
-
Dotación de misiles Meteor:El paquete incluye misiles aire-aire Meteor, con alcance de 150 km y costo entre US$800.000 y US$1 millón cada uno, además de radares, software y mantenimiento especializado.“Nadie quiere otro escándalo político… imagínese si se filtra lo que costaron misiles que no son para combatir grupos ilegales”, advirtió una fuente militar.
La tensión en torno a este contrato se agrava por el contexto fiscal: Colombia cerraría 2025 con un déficit de 7,5% del PIB, el segundo más alto en la historia reciente, según Fedesarrollo.
Contrato Mi-17: incumplimiento y helicópteros en tierra
El segundo negocio cuestionado es el convenio por US$32,4 millones con la empresa estadounidense Vertol Systems Company Inc., encargado de reparar y mantener los 20 helicópteros Mi-17 del Ejército.
Estas aeronaves, vitales para el transporte de tropas y carga, quedaron prácticamente paralizadas desde 2022 debido a las sanciones internacionales contra Rusia, que cortaron el acceso a repuestos y suspendieron el contrato que se tenía con la firma NHC Mil&Kamov.
En 2024, con solo cinco helicópteros operativos, el Ministerio de Defensa adjudicó el contrato a Vertol Systems y entregó un anticipo del 50%. La meta era cerrar el año con 11 Mi-17 en vuelo.
Vertol incumplió: solo el 8% ejecutado
La Contraloría detectó que la empresa apenas ejecutó el 8% de las obligaciones, lo que llevó a la Procuraduría a abrir una investigación preliminar. El Ministerio, a su vez, multó a la compañía por US$9 millones y exigió la devolución de los US$16 millones del anticipo.
La situación es tan crítica, que el Ejército tuvo que reactivar incluso el histórico helicóptero usado en la Operación Jaque de 2008, que en su momento el entonces presidente Juan Manuel Santos había destinado a un museo. Hoy, ante el fracaso contractual, volvió a operación por necesidad.
Un cierre de gobierno marcado por sombras en Defensa
Los cuestionamientos llegan en uno de los momentos fiscales más delicados del país y afectan dos pilares sensibles del Ejecutivo: la seguridad y la transparencia. Mientras el contrato de los Gripen apenas inicia su ejecución, el de los Mi-17 terminó sumido en incumplimientos y sanciones.
En ambos casos, las dudas sobre sobrecostos, decisiones financieras, reservas contractuales y fallas en la supervisión alimentan un nuevo capítulo de controversia alrededor del Sector Defensa en el gobierno de Petro, justo cuando enfrenta críticas por el manejo del orden público y los recientes bombardeos que dejaron menores fallecidos.
0 Comentarios