Sydney, Australia.
El atentado ocurrió durante el evento anual “Chanukah By The Sea”, una tradicional celebración comunitaria que estaba programada para iniciar a las 5:00 de la tarde con el encendido de la primera vela de la menorá, marcando el comienzo de la festividad judía de Janucá. Cientos de personas, entre familias, niños y adultos mayores, se encontraban reunidas en uno de los espacios públicos más concurridos y emblemáticos de Sydney.
Ataque dirigido contra la comunidad judía
La Policía de Nueva Gales del Sur confirmó que el ataque “tenía como objetivo a la comunidad judía” y fue oficialmente declarado como incidente terrorista a las 21:36 horas por el comisionado policial Mal Lanyon, quien señaló que se activaron poderes especiales para garantizar que no existiera una amenaza adicional para la comunidad.
Durante el operativo posterior, las autoridades hallaron múltiples artefactos explosivos improvisados dentro de un vehículo estacionado cerca del lugar del ataque, lo que elevó el nivel de alerta y obligó a establecer una amplia zona de exclusión mientras equipos especializados en desactivación de explosivos realizaban su labor.
Uno de los atacantes fue abatido por la policía, mientras que el segundo fue capturado con vida y permanece en estado crítico bajo custodia policial. Las autoridades investigan si existió la participación de un tercer sospechoso.
Escenas de terror y pánico
Videos difundidos en redes sociales mostraron a decenas de personas huyendo desesperadamente mientras se escuchaban múltiples disparos y sirenas. Otras imágenes mostraban a agentes policiales inmovilizando a sospechosos en un puente peatonal cercano, intentando reanimar a uno de ellos.
Un civil evitó una masacre mayor
Ahmed resultó herido en un brazo durante la intervención. Su acción fue grabada por un teléfono celular y el video se viralizó rápidamente. A pesar de compartir la misma religión que los agresores, fue destacado por el primer ministro del estado, Chris Minns, como “un auténtico héroe” cuya intervención salvó numerosas vidas.
Reacciones nacionales e internacionales
El primer ministro de Australia, Anthony Albanese, calificó los hechos como “profundamente perturbadores” y expresó su solidaridad con las víctimas, reiterando que la operación policial continuaba y pidiendo a la ciudadanía evitar la zona.
El Museo del Holocausto Yad Vashem pidió “hacer mucho más” frente a la creciente amenaza del antisemitismo en Australia y el mundo, advirtiendo que este ataque no fue un hecho aislado, sino consecuencia de un aumento sostenido del odio antisemita.
El ministro de Exteriores israelí, Gideon Saar, vinculó el ataque con la “creciente incitación antisemita” en el país oceánico.
Condena desde el mundo del espectáculo
Ashton Kutcher advirtió que la retórica antisemita “tiene un costo real”, mientras que la actriz australiana Rebel Wilson calificó el ataque como “lo más anti-australiano que puede ocurrir”.
El peor ataque contra judíos desde 2023
Las autoridades coinciden en que se trata del ataque más grave contra la comunidad judía desde los atentados del 7 de octubre de 2023, y uno de los más sangrientos en territorio australiano en más de una década, casi 11 años después de la crisis de rehenes en el café Lindt de Sydney.
Mientras Australia y el mundo observan consternados, la tragedia vuelve a encender las alarmas sobre el avance del extremismo, el antisemitismo y los delitos de odio, incluso en países considerados históricamente seguros.
La luz de Janucá, símbolo de esperanza y resistencia, fue atacada por la violencia, pero no apagada.
Con información de EFE, CNN, Reuters, Fox News, The Sydney Morning Herald y agencias internacionales.
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