Alrededor de la navidad se cuentan múltiples historias, y algunas de ellas nos llegan a través de El Mesías, la obra musical que desde 1741 sigue estremeciendo al mundo. En Medellín, esos sonidos permanecen vivos gracias al Estudio Polifónico de Medellín, que desde 1974 la interpreta cada diciembre como un ritual para recibir la navidad.
Mientras la ciudad se enciende con luces de colores, los vecinos se reúnen alrededor de la natilla, se arman pesebres y propios y recorren las calles para ver los alumbrados; sopranos, solistas, violinistas y un coro de cerca de 75 coralistas cantan esta historia sagrada.
Como si fuera una narración bíblica, Georg Friedrich Haendel compuso la obra en solo 24 días, para contarnos el relato de la redención humana la profecía, el nacimiento, la pasión, la muerte y la resurrección del Mesías. Combinando textos del Antiguo y del Nuevo Testamento y centrando su fuerza expresiva en la reflexión espiritual.
La obra se estrenó por primera vez un 13 de abril de 1742 en Dublín, como parte de un concierto benéfico que reunió a 700 asistentes. Pero en Medellín hace ya 50 años se estrena en cada diciembre, convocando a cientos de personas.
Tradición que nos une
Este 2025, en la versión 51 de El Mesías, titulada “Tradición que nos une”, que tendrá lugar el 10 de diciembre en el Teatro Metropolitano, el Estudio Polifónico invita a reflexionar sobre cómo la música sinfónica ha acompañado a Medellín en su búsqueda de identidad, convivencia y futuro. Un mensaje especialmente significativo en el marco de la conmemoración de los 350 años de la ciudad.
“Es tradición que nos une porque mucha gente en la ciudad, de distintas generaciones, espera El Mesías del Polifónico para ir al concierto como un ritual para dar inicio a la navidad, lo que convierte el concierto en una costumbre que tienen”, cuenta la maestra Tatiana Pérez, directora artística del Estudio Polifónico de Medellín.
En esta versión, explica Tatiana, se contará con dos coros invitados de la ciudad: Voces Oscuras Medellín y Iuventus de Sirenaica, y con la participación de la Orquesta Filarmónica de Medellín., “lo que dice que el Estudio Polifónico es un eje que permite que varias instituciones se reúnan a través de la música”, señala.
Y así como El Mesías tiene su historia en Dublín, en Medellín el Estudio Polifónico le ha creado nuestra propia historia. Una que podemos contar con nombres y voces propias.
Todo comenzó con el Maestro Alberto Correa, quien en 1974 la estrenó por primera vez en la ciudad. Cuando Medellín era un valle que se expandía entre montañas mientras buscaba equilibrar su identidad industrial con la vida tranquila de barrio. Las chimeneas textiles aún marcaban el ritmo económico, el tranvía había quedado atrás y los buses y busetas dominaban unas calles que empezaban a congestionarse. El centro hervía entre avisos luminosos, cines de estreno y cafeterías de tertulia.
Ya han pasado 51 años, los barrios se han extendido montaña arriba, las calles se han congestionado de vehículos y transeúntes, las chimeneas ya no marcan el ritmo económico de la ciudad y el tranvía ahora es eléctrico. Y en esta ciudad de hoy el Estudio Polifónico de Medellín sostiene en el tiempo la obra de El Mesías, como una manera de seguir reuniendo la ciudad alrededor de la música.
La maestra Tatiana Pérez, directora artística del Estudio Polifónico de Medellín explica que, “El Mesías es una obra muy especial para toda la humanidad, porque en diciembre es una obra de apertura a la navidad que se hace de manera simultanea en muchas partes del mundo”.
Para el Estudio Polifónico, El Mesías es una tradición que desean “cuidar y preservar en la ciudad”, como reafirma su directora.
El Estudio Polifónico de Medellín
La música sinfónica-coral se pensó durante muchos siglos, bajo la idea de “música culta”, reservada para unos cuantos. En Medellín el Estudio Polifónico ha hecho posible que taxistas, amas de casa, estudiantes de artes, profesores, músicos de rock se encuentren en un coro para cantarla; y han llevado al barrio, al oído de niños, jóvenes y adultos mayores la música clásica orquestal.
Actualmente el Estudio está conformado por coralistas y músicos vocacionales que se reúnen alrededor del coro y de la orquesta para hacer lo que más les gusta, cantar.
Fue fundado el 24 de mayo de 1966 por el maestro Alberto Correa Cadavid; es el primer coro sinfónico de Colombia y fue proclamado por el Consejo Municipal de Medellín como “Patrimonio Artístico y Cultural de la ciudad". En el 2026 cumplirá 60 años, una oportunidad para reconocer su trayectoria y aportes a la vida artística y cultural de la ciudad.
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