El calvario de los pacientes para acudir a una cita médica

 Urge puente aéreo para evacuar a personas con quebrantos de salud

Foto: Cortesía.
Ante la emergencia vial, en Ocaña se planteó reactivar los vuelos desde el aeropuerto local./

Tras el cierre de la carretera Ocaña-cúcuta por la avalancha ocurrida en la vereda El Tarrita, las personas con quebrantos de salud padecen una odisea durante el traslado hacia la capital del departamento para la atención especializada.

En estos instantes cobra importancia la implementación de una ruta aérea para el traslado de los enfermos reportados en esta zona del país y no someterlos al famoso ‘paseo de la muerte’.

Una alternativa para remediar esa situación y superar la emergencia es reactivar los vuelos en el aeropuerto de Aguas Claras que está subutilizado debido a la falta de rentabilidad para algunas empresas que se han llevado las aeronaves ante la poca demanda de tiquetes.

Teniendo en cuenta la crisis humanitaria por la emergencia vial, los voceros cívicos de la región insistieron en que Satena abra rutas hacia esta parte del departamento como sociedad de economía mixta por acciones vinculada al Ministerio de Defensa, con tarifas subsidiadas por el Estado, .

Acciones de emergencia

Los dirigentes de la región le solicitaron al presidente de la República, Gustavo Petro, acciones inmediatas y urgentes para mitigar los efectos de la catástrofe natural.

El ex rector de la universidad Francisco de Paula Santander, seccional Ocaña, ingeniero Gustavo Adolfo Casadiego Angarita, es partidario de la llegada de Satena, porque estimula todas las variables del sistema: económicas, sociales e institucionales.

El representante a la Cámara, Ciro Antonio Rodríguez Pinzón, manifestó que siempre han estado haciendo gestiones, para lograr un puente aéreo Cúcuta-ocaña. “Por ahora se logra aumentar un día más los vuelos desde el aeropuerto Hacaritama en Aguachica hacia Bogotá, que aspiramos pueda tener vuelos diarios y conexión con la Costa Atlántica”, recalcó.

El presidente ejecutivo de la Cámara de Comercio, ingeniero Fabio Rincón Ortiz, indicó que a pesar de las gestiones de entidades municipales y representantes la región, no han podido contar con una ruta aérea que conecte no solo con Cúcuta sino con la capital de la República.

“Las aerolíneas aducen que no es rentable prestar este servicio debido a la poca afluencia de pasajeros, la única solución es una subvención o subsidio de parte del Estado a la empresa Satena, teniendo en cuenta la emergencia vivida por los habitantes de la zona”, precisó.

Aterrizar una propuesta

El exdirector del aeropuerto de Aguas Claras de Ocaña, Luis Albeiro Páez Echávez, señaló que durante su administración propuso al gobernador de Norte de Santander, Silvano Serrano, de parte de la oficina de gestión social o secretaría de Desarrollo Económico apersonarse de una solución.

Su propuesta contemplaba la compra una aeronave por valor de entre $3.000 millones a $4.000 millones, para 14 pasajeros

Fabio Rincón, presidente ejecutivo de la Cámara de comercio.

Luis Eduardo Vergel, ex alcalde de Ocaña. y capacidad de carga o también un avión ambulancia para el traslado de pacientes con el fin de mitigar los escollos presentados en la arteria vial.

“Destinado a un fin social para remediar problemas, abierto a un servicio comercial con pasajes a $150.000 por persona, sería rentable. Correría por cuenta del gobierno seccional la licencia ante la Aeronáutica Civil, el mantenimiento y el sueldo de los pilotos”, precisó.

Explicó que la idea puede consolidarse mediante “una bolsa común con los alcaldes para mantener un avión social para este tipo de servicios. Ya que Satena no va a venir si no tienen un punto de equilibrio en el mundo de la competencia”.

Las aerolíneas aducen que no es rentable prestar este servicio debido a la poca afluencia de pasajeros, la única solución es una subvención o subsidio de parte del Estado a la empresa Satena”

Replantear el servicio de salud

El exalcalde de Ocaña, economista Luis Eduardo Vergel Prada calificó urgente aprobar la reforma de salud para que los pacientes tengan libre movilidad en la atención médica ante avalanchas, derrumbes y cierres de carreteras.

Desde hace días y por tiempo indeterminado según INVIAS la carretera que comunica a las dos principales ciudades del departamento Norte de Santander -Cúcuta y Ocaña- con la frontera de Venezuela, concretamente en el centro poblado de El Tarra perteneciente al municipio de Abrego, se encuentra incomunicada ante la avalancha sobre el río Tarra que arrasó con cosechas, la escuela, puentes y las casas invadidas por el barrial, expone el mandatario.

“La crítica situación ha puesto en calamidad a sus casi 200 habitantes y los pacientes de la región del Catatumbo que congrega una población de 300.000 habitantes quienes sufren de manera alarmante las remisiones médicas a la capital, Cúcuta; es un sistema de salud arcaico que exige la urgente aprobación en el Congreso y que los representantes políticos no pueden darle la espalda a la comunidad”, agregó.

“Ocaña cuenta con un hospital de segundo nivel quebrado por las EPS con una cartera que sobrepasa los $100.000 millones y las remisiones al tercer nivel debe hacerse con Cúcuta de acuerdo al sistema actual agravando a los enfermos pues estos deben optar por el doble de tiempo al transitar por Bucaramanga para viajar”, puntualizó.

Señaló que el nuevo sistema de salud, estancado por los congresistas ausentes, facilitaría esta anomalía pues las remisiones no necesariamente deberían realizarse con Cúcuta sino también ante Bucaramanga.

El aeropuerto puede suplir esta calamidad para trasladar por vía aérea los pacientes remitidos a Cúcuta. “Se requiere soluciones inmediatas para resolver el tránsito ante la avalancha presentada en el Centro Poblado de El Tarra; Satena frecuentemente ha intentado cubrir la ruta aérea Ocaña-cúcuta y ante situaciones de cierres de vías en cualquier lugar de Colombia la nueva reforma del sistema de salud soluciona la movilidad para los pacientes que requieren remisión médica”, dijo el profesional.

“La crítica situación ha puesto en calamidad a sus casi 200 habitantes y los pacientes de la región del Catatumbo que congrega una población de 300.000 habitantes quienes sufren de manera alarmante las remisiones médicas a la capital”

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