El presidente Gustavo Petro estaría preparando nuevos cambios de algunos de sus ministros, para el inicio de su segundo año de gobierno. /
A las puertas del segundo año de gobierno de Gustavo Petro, el próximo 7 de agosto, los rumores agitan la posibilidad de un nuevo y eventual remezón ministerial.
El tsunami tocaría al canciller, Álvaro Leyva; al ministro de Defensa, Iván Velásquez; y al jefe de la cartera de las TIC, Mauricio Lizcano, de acuerdo con la versión de La FM.
Sin embargo, los tres tuvieron protagonismo en las últimas semanas y entregaron resultados desde sus despachos, lo que puso un interrogante sobre la versión mediática.
A Leyva se le atribuye gran parte del éxito en el caso de Nicaragua, que pretendía ampliar su plataforma continental extendida, mediante una demanda ante la Corte Internacional de La Haya.
El Canciller tan pronto asumió el cargo conformó un nuevo equipo de defensa, incluidos raizales, cuya presencia, de acuerdo con la versión del Presidente, contribuyó al «triunfo» colombiano, dado que el Tribunal internacional negó las pretensiones de Managua.
Sin embargo, mientras los vientos soplan con fuerza contra algunos ministros, en otros despachos todo es calma.
En la cartera de Cultura se mantiene como encargado Jorge Zorro, tras la salida traumática de la dramaturga Patricia Ariza, razón por la cual representantes del sector, que tanto apoyo le dieron a Petro durante la campaña electoral a la Presidencia, han lamentado esa suerte de desidia del Jefe de Estado al mantener la interinidad.
De darse los cambios que sugieren algunos medios de prensa, la lista de ministros que ya se marcharon de sus cargos aumentaría considerablemente.
Hasta ahora 11 personas se fueron de la administración Petro, el mayor remezón se produjo durante la renuncia protocolaria solicitada por el mandatario.
En un año de administración ya se marcharon Alejandro Gaviria, María Isabel Urrutia, Patricia Ariza, José Antonio Ocampo, Alfonso Prada, Carolina Corcho, Cecilia López, Sandra Urrutia, Guillermo Reyes y Arturo Luna.
La última en salir fue Irene Vélez, la controversial ministra de Minas y Energía, agobiada por la presión desatada frente el escándalo de un supuesto tráfico de influencias.
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