La tranquilidad del barrio Aeropuerto en Cúcuta se vio perturbada por el sonido de múltiples disparos en la mañana de ayer, un fatídico evento que marcó el trágico final de Melkisedec Balaguera, un empresario del transporte de 39 años.
La comunidad, alarmada por los estruendos, salió de sus hogares solo para encontrarse con el cuerpo sin vida de Balaguera en medio de la calle. La consternación y el horror se apoderaron del vecindario, que no podía creer lo que veía.
Según testigos, Balaguera fue abordado por varios hombres armados cuando salía de su casa para iniciar su jornada laboral. Tras un breve intercambio de palabras, los sicarios le dispararon a quemarropa, acabando con su vida de manera instantánea. El vehículo en el que se movilizaban los agresores, un automóvil azul, huyó del lugar rápidamente tras cometer el crimen.
Las autoridades, al confirmar el fallecimiento de Balaguera, desplegaron un amplio operativo para dar con los responsables del homicidio. Se están revisando las grabaciones de las cámaras de seguridad y se han realizado entrevistas para obtener más información sobre los perpetradores.
Dos hipótesis principales se barajan en torno al motivo del ataque: un posible ajuste de cuentas o un intento de robo que culminó en tragedia. Las autoridades también investigan si Balaguera tenía antecedentes judiciales o si había recibido amenazas previas.
El empresario, representante legal de una empresa de transporte en Tibú, deja atrás a una familia destrozada por su pérdida. Residente del barrio Aeropuerto, compartía su vida con su expareja sentimental y su hija de 8 años, quienes ahora se enfrentan a la devastadora realidad de su ausencia.
Mientras la comunidad se une en el duelo y exige justicia, las autoridades intensifican sus esfuerzos para esclarecer este crimen y llevar a los responsables ante la justicia. La muerte de Melkisedec Balaguera no solo deja un vacío en su familia y la comunidad, sino también plantea interrogantes sobre la seguridad en la ciudad y la violencia que continúa cobrando vidas inocentes.
0 Comentarios